Un sistema de AEROTERMIA se basa en extraer energía a partir del aire exterior mediante una bomba de calor inverter de alta eficiencia. El aire a cualquier temperatura por encima del cero absoluto contiene un mínimo de energía, la bomba de calor de fuente de aire transfiere parte de esta energía en forma de calor de un lugar a otro, por ejemplo, entre el exterior y el interior de un edificio. Para ello, se necesita una unidad exterior, y una o varias unidades interiores.

En aire acondicionado o climatización convencional, la bomba de calor se utiliza para calentar o enfriar el aire de los locales a climatizar, siendo por lo general, sistemas de aire-aire o de expansión directa de un refrigerante.

En los sistemas de aerotermia las bombas de calor son del tipo aire-agua. Se extrae la energía existente en el aire exterior (calor) y la cede al agua que se aporta al sistema de calefacción y/o agua caliente sanitaria. Estas bombas, están diseñadas y construidas para obtener el máximo rendimiento en condiciones climáticas severas, tanto en invierno, como en verano.

Los sistemas de aerotermia están inicialmente diseñados para utilizarse en viviendas unifamiliares, así como pequeños-medianos edificios, tanto para inmuebles existentes, como para nuevas edificaciones, que dispongan de emplazamiento para la instalación de las unidades exteriores.

La combinación perfecta, sería con un sistema de calefacción de baja temperatura, como el suelo radiante o radiadores eficientes con sistema de paneles solares térmicos.

Las bombas de calor de fuente de aire pueden durar más de 20 años con bajos requisitos de mantenimiento, incluso en lugares donde los inviernos son extremadamente fríos. Las pocas partes móviles reducen los requisitos de mantenimiento, no obstante, es necesario que el intercambiador de calor al aire libre y el ventilador se mantengan siempre limpios.